Tzáhal enfrenta campos de batalla totalmente nuevos
El jefe del Estado Mayor de Tzáhal, teniente general Gabi Ashkenazi, tiende a ser bastante parco en elogios para sus oficiales. Por lo tanto, es particularmente notable, los frecuentes elogios al General de Brigada N., comandante de la unidad del Cuerpo de Inteligencia de 8200.
El jefe del Ejército, como una docena de oficiales del Estado Mayor General de Inteligencia Militar, la Fuerza Aérea, la Armada y unidades especiales, viven en un ambiente reservado de operaciones encubiertas. Además del personal militar, participan civiles del Servicio de Seguridad Interior (Shin Bet), el Mossad y algunas veces la Policía, así como un puñado de ministros y asesores de la cúpula política.
A este mundo, que siempre existió, se añadió recientemente el campo de las actividades militares relacionadas con las redes de comunicaciones y computadoras, para los que el Ejército israelí considera el nuevo marco.
N. es un veterano del Estado Mayor General, Sayeret Matkal y otras dependencias sensibles de la Inteligencia Militar. Por una operación de profundidad, en territorio hostil, fue galardonado con una mención por el jefe de Tzáhal.
El desempeño del general de brigada Dany Harari como comandante del 8200 no se considera un éxito brillante y este año Ashkenazi y el jefe de la Inteligencia Militar, General Amos Yadlin (foto) decidieron nombrar a N. al mando de la unidad.
A diferencia de la mayoría de sus predecesores en 8200, N. proviene de la esfera de las operaciones, lo que lo coloca en pie de igualdad con las brigadas y divisiones de Infantería y vehículos blindados.
La actitud de Ashkenazi hacia el general de brigada N. es susceptible de considerarse el triunfo de la Inteligencia militar en una lucha oculta ha estado sucediendo en el Ejército sobre una cuestión de organización fundamental y es sobre qué organismo estará autorizado para coordinar la lucha contra la caber-delincuencia.
Yadlin, un antiguo piloto de caza y cabeza de un escuadrón de Inteligencia de la Fuerza Aérea, habló de la necesidad de preservar la disparidad tecnológica en favor de Israel, una supremacía más evidente en sus capacidades de Inteligencia y de la fuerza aérea y que la combinación de las dos armas guiadas para atacar objetivos con precisión tendrá un impacto decisivo."
Las capacidades de los enemigos de Israel, dijo Yadlin, aún están lejos de igualar los de Tzáhal pero están desafiando "nuestra supremacía tecnológica por medio de misiles de precisión, informática, armas antiaéreas, GPS y aviones sin piloto."
El jefe de Inteligencia aconsejó a sus oyentes a pensar cuidadosamente acerca de sus ordenadores personales, teléfonos celulares y los hábitos de Internet, incluyendo los archivos de imágenes que indican los campos de interés, documentos profesionales y todo lo que un extranjero podría ser capaz de aprender de sus datos bancarios y las reservas hechas para los vuelos en el extranjero.
Además de la Inteligencia Militar, se encuentra la Subdivisión de Teleproceso, una forma más moderna del Cuerpo de Comunicaciones y el más joven de las ramas del Estado Mayor General
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